En palabras...

Today the Doodle of Mexico Google is dedicating to Juan Pablo Moncayo. He was a composer of Jalisco, tequila land. He was born in 1902, and he died in 1958.  His most famous musical composition is the "Huapango de (of) Moncayo". This piece of music is sample of the traditional music of Mexico. The "Huapango" is a Mexican musical genre and I think and feel that it's cheerful, funny and invites to dance. Music is the universal language and I hope you enjoy it. Huapango de Monc ayo, Berlin Philharmonic: http://www.youtube.com/watch?v=8CT4dK5W8Q0 Huapango de Moncayo, Symphony of Mining, Mexico: http://www.youtube.com/watch?v=dkVcwrL1hog

* Este libro deja un buen sabor visual. - Fragmentos - El público que no sea técnico, no sabe, no puede saber cómo son las batallas del escritor con las palabras para dominarlas y manejarlas a su antojo; no entiende que su secreto consiste en encontrar las voces, asilarlas, para después emplearlas con tino y gusto. (...) Porque los libros, como la cátedra, la prensa y la tribuna, son guías del alama de los pueblos. (...) Los vocablos son el tesoro del espíritu. A mayor abundancia de ellos, mayor riqueza del lenguaje y más grande floración de pensamientos. Porque la palabra crea ideas. Cada una es una luz que describe situaciones, horizontes, méritos, estados de alma. (...) porque las palabras nos vivifica, nos alientan, son como gatos de sangre que van pasando del corazón al cerebro y del cerebro a la pluma, para fortalecerla, dándole empuje, afinación, inspiraciones. (...) Otro de sus ideales era el ser fiel a la lealtad y hacía sí mismo. La lealtad a sí p

Seno de la nocturna                urna es la luna que surge                urge mañana desastrosas                rosas beben leche de estrellas                ellas.

En Arena de noches germinan las estrellas. Las ramas se desatan sobre el túmulo inmenso. Y en la tierra -almácigo de no sé qué semilla- los corazones duelen al crecer.          Dos jardines en la luz que dormita.

Un día se desplomó. Roto cauce de estrellas desvaídas. Minutos luz que emergen y se apagan. Vértigo que se entrega al desmayo total.                 En el sueño reposo mi cansancio -dura almohada-.

Todas las horas roen algo de nuestra vida. El tiempo ara los campos de nuestra piel, y dentro, el hastío cultiva su oquedad. Goznes anquilosados del clown -¡fin de fiesta!- que después de la risa, los cordones por tierra sobrevive al olvido tras olvido.

¿Estoy despierta? Sí, tal Segismundo, que no sabía si el sueño es sólo sueño ni el despertar es sólo una mentira. Hay alguien que me engaña y no lo veo, ni sé cuándo es verdad, cuándo mentira. Es el gran escenario: ¿son aquellos, otros intoxicados por la vida, a todos son fantasmas de mi ensueño? Francis, Susana. Desde la cárcel de mi piel . FCE, México, 1967.

Ante la oquedad Tú para quien el tiempo era ya espacio Tal vez hayas tenido tu fe inextricable Tierna y feroz como una exacta armadura Casi un siglo y de pronto se ha roto Te restó sólo la edad sumada de mis dos hijos Imagen de la fugaz que es imperecedero Se necesitaría el tiempo de los árboles Mudos y abiertos en su forma única Amarillento jardín del recuerdo de la infancia Sin principio ni fin del mismo modo Amarillentos como todo lo vivido Y allí ¿qué te esperaba? ¿La pálida voz d tu hija de muerta que te llamaba del fondo del portal? ¿Las ánimas que entre la noche y el día acompañaban tu rosario? O quizás sólo el silencio que te deja en manos de tu estirpe Estás aquí todavía Recuperando el otro olor en la piel de tus nietos Sobre el oscuro recuerdo de lo que siempre estuvo vivo Tierno y feroz también como tu fe en el mundo El paso es lo que cuenta Ninguna edad es suficiente para cercar el límite Ahora decisiones sobre ti misma hasta tocar tu fondo Una t

¡Ah, yo quiero una así!

¡Para disfrutar la música!