Al morir no diré: "He sido".
Ni me lamentaré, ni buscaré culpables.
En el mundo algo más importante ha sucedido
que tormentas de pasiones y gestas de amantes.
Tú - en este pecho tu ala batiste,
jovenzuelo culpable de la inspiración.
Yo a ti te ordeno: ¡existe!
Yo no abandono esta sumisión.
Ni me lamentaré, ni buscaré culpables.
En el mundo algo más importante ha sucedido
que tormentas de pasiones y gestas de amantes.
Tú - en este pecho tu ala batiste,
jovenzuelo culpable de la inspiración.
Yo a ti te ordeno: ¡existe!
Yo no abandono esta sumisión.
30 de junio de 1918
Comentarios
Publicar un comentario