Ir al contenido principal

ClX - La destrucción - Baudelaire

El Demonio, a mi lado, me asedia a sus tentaciones;
flota a mi alrededor como un aire impalpable;
lo respiro y lo siento abrasar mis pulmones
que llena de un deseo infinito y culpable.


Toma, a veces, la forma, sabiendo que amo el Arte
de la más seductora de todas las mujeres,
y con bajos pretextos que adopta por su parte,
acostumbra mis labios a nefando placeres.


Lejos de la mirada de Dios me ha conducido,
jadeante y destrozado, de fatiga rendido,
a las tierras del tedio, profundas y desiertas,
y ante mi vista roja, llenas de confusión,
vestiduras manchadas y heridas entreabiertas,
el sangriento aparato de toda destrucción!

Comentarios